Calienta el aceite en una sartén grande a fuego medio. Agrega el pollo y cocina de 4 a 5 minutos por cada lado.
Agrega la pimienta, ajo, cebolla y caldo. Tapa y cocina a fuego medio hasta que se evapore el caldo, entre 7 y 10 minutos.
Agrega la salsa de tomate, tapa y cocina a fuego lento durante 10 minutos.
Espolvorea el queso sobre la superficie, tapa y cocina durante 3 minutos.
Disfruta con tu familia una deliciosa receta.